Wednesday, April 04, 2007

YO ENSEÑO ¿TÚ APRENDES?

"Tú enseñas ciencia; muy bien; yo me ocupo de forjar los instrumentos para su adquisición... No es asunto tuyo enseñarles las diversas ciencias, sino proporcionarles la afición a ellas y los métodos de aprenderlas cuando esta afición madure.
Este es sin duda un principio fundamental de toda buena educación".
Emilio (ROUSSEAU, 1762)

Para entender nuestro planeamiento debemos considerar algunos conceptos previos, en primer lugar, decir que la educación es exclusiva del ser humano y que a su vez éste es una unidad funcional de vida, compuesta de tres estructuras fundamentales, lo biológico, lo psicológico y lo social.

Este ente tan peculiar, que es el ser humano, presenta algunas caracterizaciones que lo individualizan y lo elevan en la escala animal, asumiendo el rango de categorizaciones, entre las que destacamos la EDUCABILIDAD, considerada como la capacidad de adquirir educación, entonces podemos afirmar que todo ser humano, independiente de sus características mentales, sensoriales, físicas o sociales, puede adquirir educación; por otra parte, y lo que justifica nuestra profesión, es la categorización de la EDUCATIVIDAD considerada como la capacidad de influir en otros seres humanos; si nos ponemos desde esta óptica podemos definir al educador como el científico de la educatividad, pues es él quien, en uso de la epistemología pedagógica, otorga los atributos necesarios de esta influencia y la pone a disposición de sus educandos en el entorno de aprendizaje.

Con el objeto de movilizar la educabilidad, el gran desafío del educador será entonces, considerando las caracterizaciones de la sociedad moderna y por ende la de nuestros alumnos/as, prioritariamente su compromiso con la generación de aprendizajes, en sus influenciados/as, y dar a cada uno de ellos/as idénticas oportunidades de éxito, desafío que requiere múltiples competencias.

La interrogante que nos aparece es ¿qué debo hacer para lograr ésto?

Proponerse estimular procesos de enseñanza y aprendizaje, tal y como es función de las instituciones docentes, obliga a no dejar al margen las condiciones y filosofías subyacentes que enmarcan tales procesos.

Es desde las finalidades de las escuelas, los objetivos sociales que tienen encomendados, donde hay que plantearse el por qué de los contenidos curriculares que se eligen o promueven, las asunciones acerca de cómo se promueven procesos de aprendizaje y modelos organizativos coherentes con las dimensiones del contexto social.

Aprender es desarrollar procesos de comprensión sobre la realidad que inducen a la participación en ella y se originan a partir de las tareas escolares con las que día a día se comprometen las alumnas y alumnos en las aulas.

Aprender es participar en un clima de aula que incita a quienes allí participan a entrar en situaciones de diálogo y cooperación entre sí, sirviéndose de los recursos y materiales curriculares adecuados para llegar a mayores niveles de comprensión de las situaciones sociales en las que interactúan y conviven.

Hablar de educación conlleva referirse a un elemento, de un proyecto más amplio cual es planificar la sociedad del futuro; es contribuir a socializar a las nuevas generaciones sobre la base del estudio y reflexión del actual legado cultural que disponemos y capacitarlas para diseñar cómo mejorar nuestro mundo. Es por tanto, parte de un proceso político de gran envergadura cual es el de configurar el futuro.

Toda propuesta curricular implica tomar opciones entre distintas parcelas de la realidad, supone una selección de la cultura que se ofrece a las nuevas generaciones para facilitar su socialización; para ayudarles a comprender el mundo que les rodea, conocer su historia, promover valores y utopías. Así pues, surge ya un primer interrogante: ¿quiénes son las personas que van a participar en esa toma de decisiones acerca de dicha selección de contenidos, y por qué?.

Uno de los conceptos actuales de aula es el referido a aquel espacio donde se construye una pluralidad de saberes con sentido y significado cultural. Por consiguiente, lleva dentro un proceso investigativo de construcción.

Ante la preocupación por la calidad de la educación, se hace urgente la necesidad de generar conciencia en todos sus responsables, de otorgarle importancia a los estudios investigativos que den cuenta de la compleja realidad educativa y de ese modo poder actuar de acuerdo con las necesidades nacionales, regionales, locales, institucionales y personales.

Las políticas educativas en Chile se concretan en la Ley Orgánica Constitucional de la Enseñanza LOCE y en ella se hace evidente la necesidad de la investigación educativa. En consecuencia, el nuevo educador debe estar dotado de las capacidades éticas, pedagógicas y científicas que le permitan desempeñarse con profesionalismo frente a los problemas y exigencias del medio educativo.

Diversas contribuciones de las teorías sociales, culturales, pedagógicas, psicológicas, económicas caracterizan el aula como reflejo de aquello que la sociedad exige que se enseñe. Los investigadores han encontrado laboratorios de observación en ella, por cuanto todos los espacios formales e informales se convierten en espacios sociales de participación e interacción en ese vasto universo escolar. El aula de clase es un contexto natural de investigación porque lo que ocurre en su interior adquiere un sentido propio y profundo para docentes, estudiantes y sociedad.

La calidad de la educación se puede mejorar incrementando la formación y actualización del docente, pero estas estrategias por sí solas serán fórmulas de solución parcial si no se acompañan de estudios que profundicen en los problemas propios del proceso de enseñanza-aprendizaje.

Surge así la importancia de construir un concepto de aula más allá de los espacios físico-temporales, donde se supere la idea instrumentalista y mecanicista de la enseñanza y del aprendizaje para dar cabida a la construcción y reconstrucción de saberes. De la misma manera, compete a los actores reflexionar acerca del sentido de su propia práctica en los escenarios del aula y de la escuela.

La existencia de factores diversos dentro de las aulas, tales como las variadas formas de lenguaje, las actitudes, las expectativas, la formación profesional de los maestros, las historias académicas, las experiencias pedagógicas, las metodologías de enseñanza, los contenidos temáticos, los diagnósticos y planes institucionales, indican la imposibilidad de contar con un método único y exclusivo de aproximación al conocimiento de la sala de clases.

Se hace necesario el uso de diferentes enfoques, metodologías, técnicas e instrumentos para producir conocimiento en el complejo mundo social del aula. El enfoque interpretativo contribuye significativamente a la reflexión en su propia práctica en el aula fundamentalmente porque:

la naturaleza de las aulas como espacio social y cultural organizado intencionalmente para el aprendizaje;
la búsqueda de sentidos visibles e invisibles en las relaciones profesor-alumno
la interpretación y construcción de saberes desde el punto de vista de los participantes. Creatividad, innovación, sorpresa y reflexibilidad son conceptos que se destacan en este tipo de acercamiento.
El saber pedagógico se construye cuando el profesor escribe lo que hace, lo que piensa y lo que descubre
Una actividad encaminada a la creación de un cuerpo organizado de conocimientos científicos, sobre todo, cuanto interesa a los educadores, tiene por objeto descubrir los principios generales o las interpretaciones del comportamiento que sirven para explicar, predecir y controlar los eventos en situaciones educacionales, o sea, se propone elaborar una teoría científica.

La educación, en general, propende al desarrollo de competencias a nivel superior en el que aprende, competencias que se relacionan con el desarrollo de los procesos mentales superiores, ésto debido a la exigencia que le impone su desempeño en el mundo actual, no sólo en su necesidad de enfrentar una acción laboral, sino también en sus relaciones personales e interpersonales con el resto de la sociedad.

Estas exigencias revelan la importancia que tienen para el educando las capacidades de prever o anticipar, analizar, sistematizar y sintetizar, planificar y resolver problemas y situaciones de diferentes planos en los que la persona se desarrolla.

El interés por comprender la mente humana no es nuevo. Existen diferentes posturas o enfoques para tratar de entender como se concibe actualmente estos procesos cognitivos superiores, puesto que comprender su estudio es una situación compleja, especialmente por las peculiaridades del objeto de estudio que se caracteriza por :

§ Los fenómenos mentales son inaccesibles a la observación , sólo se pueden observar los productos externos, pero no los procesos subyacentes
§ Los procesos mentales son veloces, al parecer de una simplicidad engañosa

El sistema cognitivo es interactivo. Existe una dependencia de todos los componentes del sistema, lo que dificulta aislar las variables.
La creatividad es una facultad humana que en unión con la imaginación, la afectividad, la originalidad y la cognitividad, aportan a los seres humanos una fuente de recursos generadores de experiencias, conocimiento y desarrollo fundamentales para la propia realización.
La excentricidad, la peculiaridad, la singularidad y la propiedad son características que usualmente se asocian al concepto de creatividad.
Lo sorprendente, lo inusitado, lo nuevo, lo original, lo peculiar y lo raro, popularmente se remiten aproximadamente a la creatividad. Lo innegable aparece en que la creatividad se pueda expresar como algo sorprendente, inesperado, novedoso, versátil y de peculiar singularidad, aunque sin embargo el concepto va más allá de esas connotaciones.
A través de los aportes propios de la Pedagogía, la Psicología y la Filosofía, el término creatividad se refiere a una cualidad o propiedad de la personalidad humana, proyectada ya sea de forma intelectiva, motivacional o actitudinal. La combinación de esta visión independiente y complementaria aporta una adecuada conceptualización del término en sí.
Tradicionalmente el término se utilizó reductivamente a las personas que se mueven en el campo del arte, producto del avance científico y tecnológico, podemos decir que la creatividad es una herramienta a la que todos tenemos acceso y que podrá ser mejor si la trabajamos diariamente para alcanzar niveles más elevados en cada uno de nuestros alumnos.

La naturaleza de la creatividad es de suyo complicada, por las múltiples aristas que ésta tiene por ser una función típicamente humana, que incluso pueden resultar complementarios en una visión holística al realizar un análisis más profundo.

Pata entender mejor este fenómeno es fundamental conocer cuál es su naturaleza, cuáles son los elementos que la constituyen, identificar las características que hacen que un producto o un proceso pueda categorizarse como creativo, qué funciones cognitivas se presentan o se requieren para llegar a la creatividad, qué tipo de contextos escolares favorecen el que la creatividad se enriquezca, cuáles son los pasos o las etapas que recorre el proceso de la producción creativa.

En estos momentos es relativamente fácil encontrar información de cómo desarrollar la creatividad en el aula; aunque la mayor parte de estas propuestas hace una simplificación de esa tarea tan trascendente y necesaria.

Entre otros se destacan aquellos que informan que la creatividad es una característica del pensamiento y como tal es posible desarrollar independiente de las aptitudes que éstos tengan, estimamos que por la condición primera que informamos, en cuanto a la unicidad del ser humano, la creatividad debe estar inserta en todo el desarrollo, del curriculum escolar, en una visión holística integradora.

Queremos analizar algunos aspectos importantes para plantear el reto de desarrollar la creatividad en el aula, aprovechando los tiempos y los espacios privilegiados que tiene la escuela en la formación de los individuos, para hacerlo simultáneamente al cumplimiento de las exigencias de los curricula escolares. En un afán de poner al educador/a en una posición de reflexión de su propia creatividad y la alternativa de transmitirla asu educandos.
La necesidad de aprendizaje del educando obliga al educador/a incorporar este elemento en la cualificación de su entorno de aprendizaje, es decir siempre hay otra forma de presentar el contenido de aprendizaje

¿Qué es la creatividad?
Hay concepciones de la creatividad que hablan de un proceso, otras de las características de un producto, algunas de determinado tipo de personalidad y también hay otras que hablan de la forma que tienen algunas personas de operar su pensamiento; la sociedad actual obliga al sujeto que la compone a actuar creativamente, en función de poner valor agregado a su producto, es lo que caracteriza el planteamiento que la sociedad moderna es para los emprendedores , con ello estamos atendiendo a los cuatro pilares de la educación expresados en el Informe Delors, “ La educación encierra un tesoro”
[1]

La creatividad es "algo" que todos tenemos en diferente medida, es una capacidad que identifica al ser humano, y como tal puede ser desarrollada se representa cuando tenemos la visión para detectar el quiebre de lo instituido, por lo tanto la creatividad la podemos encontrar en todas las manifestaciones humanas
Es interesante estudiar la creatividad en las personas altamente creativas; pero realmente nuestra atención debe estar en el estudio y propuesta de desarrollo de todos nuestros alumnos/as, ya que son la realidad que tendrá la responsabilidad de manejar nuestro país en un futuro próximo.
Todos los profesores/as pretenden que al final del curso todos/as su alumnos/as alcancen los objetivos propuestos, tanto los explícitos como aquellos no explicitados, donde la creatividad está jugando un papel de transversalidad, en cuanto a que los alumnos formen su propio pensamiento crítico, en las acciones didácticas en el aula.

¿Cuáles son las características esenciales del pensamiento creativo?

Se establecido que la creatividad es una función superior de los seres humanos, por tanto para desarrollarla implica incidir sobre varios aspectos del pensamiento; las cuatro características más importantes del pensamiento creativo son:
La fluidez
La flexibilidad
La originalidad
La elaboración

La primera característica se refiere a la capacidad de generar una cantidad considerable de ideas o respuestas a planteamientos establecidos; en este caso se busca que el alumno pueda utilizar el pensamiento divergente, considerando la respuesta alternativa a un problema, es decir que tenemos claro que 2+2=4, pero que también puede ser 1+1+1+1+1; 5-1, etc.etc.

La segunda considera manejar nuestras alternativas en diferentes campos o categorías de respuesta, es pensar ¿cómo realizaré una clase de cualquier tema sin tener un material didáctico específico?, utilizando los elementos ambientales .

En tercer lugar encontramos a la originalidad, que es el aspecto más característico de la creatividad y que implica pensar en ideas que nunca a nadie se le han ocurrido o visualizar los problemas de manera diferente, es decir ¿Cómo reutiliza el stock , un empresario que fabricaba ganchos para la ropa de alambres y que quebró?

Una característica importante en el pensamiento creativo es la elaboración, ya que a partir de su utilización es como ha avanzado más la industria, la ciencia y las artes. Consiste en añadir elementos o detalles a ideas que ya existen, modificando alguno de sus atributos. Por ejemplo: el mejoramiento de los programas computacionales

La inteligencia juega un papel importante en la creatividad, ya que permite generar ideas, redefinir problemas y buscar ideas que funcionen, aquí encontramos relación con las tres partes de la teoría triárquica del primer autor: la parte sintética, la analítica y la práctica. La inteligencia es la que aporta elementos importantes para el análisis de la información, como la codificación selectiva, la combinación selectiva y la comparación selectiva, requeridas en un pensador creativo. Además es importante saber cuál idea es buena y cuál no lo es, la creatividad exige no sólo proponer ideas buenas sino saber en dónde existe un problema interesante, qué recursos hay que asignar para su solución, cómo abordarlo, cómo evaluar nuestra intervención, todo esto nos lo proporciona la parte analítica de la inteligencia y la parte práctica de la misma nos permite reconocer cuándo las ideas funcionan y cuáles ideas pueden estar destinadas al fracaso.

¿Cómo relacionar el desarrollo del pensamiento creativo con el currículum básico?

El Marco Curricular de la reforma Educativa no sólo tiene como finalidad que los niños obtengan y almacenen conocimientos; una de las líneas más importantes es desarrollar en ellos habilidades y capacidades cognoscitivas y afectivas, es ahí en donde la creatividad encuentra justificación; además, la formación de los perfiles que se necesitan para enfrentar el futuro no puede dejar de lado este aspecto tan importante del individuo.
Tanto las características de la creatividad, los recursos que en ella interactúan, así como las etapas del proceso creativo nos dan elementos para el diseño de estrategias de trabajo en el salón de clases. Todos los docentes debemos incorporar a nuestras prácticas técnicas que desarrollen la creatividad contextualizándolas con lo establecido, buscando el desarrollo del pensamiento creativo y tomando como materia prima lo contemplado en el currículum básico, esto es: la estructura organizativa de los contenidos temáticos no es un obstáculo para trabajar creatividad, se pueden llegar a los mismos objetivos y metas de una manera diferente, logrando experiencias más significativas y más enriquecedoras.

¿En qué ayuda la creatividad a la educación?

El maestro, preocupado por integrar en sus metas curriculares el desarrollo de la creatividad, debe tener claro que para hacerlo es necesario modificar el contexto educativo preocupándose por:

· Que los niños generen mayor cantidad de ideas acerca de cualquier situación planteada.
· Que exista mayor libertad para expresar todas las ideas, por muy descabelladas que suenen.
· Invitarlos a que piensen ideas diferentes a las acostumbradas.
· Que busquen ideas poco comunes para resolver los requerimientos que les hace el propio maestro.
Que se esfuercen por complementar sus ideas pensando en que sean más eficaces y añadan elementos para fortalecerlas.
Que escuchen las opiniones de otros, ya que el diálogo puede enriquecer las visiones que se tienen de los problemas.
Que analicen sus propuestas, las experimenten y comuniquen sus observaciones.
Que estas recomendaciones se realicen de manera cotidiana, independientemente del contenido que se está revisando, para así acostumbrarlos a que la creatividad no es un espacio para relajarse e informalmente jugar con las ideas; por el contrario, considerar que es un camino que amplía nuestra panorámica de solución de problemas reales.

La creatividad es necesaria en todas las actividades educativas, porque permite el desarrollo de aspectos cognoscitivos y afectivos importantes para el desempeño productivo. Ante este panorama su incorporación a las aulas representa la posibilidad de tener en el recurso humano el agente de cambio capaz de enfrentar los retos de una manera diferente y audaz; esta meta es un reclamo de la sociedad a la escuela como institución formadora de individuos. Ante este importante cuestionamiento de qué aporta la creatividad a la educación el doctor Taylor ha dicho desde hace tres décadas:

Queremos estudiantes que sean pensadores, investigadores e innovadores; no sólo aprendices, memorizadores e imitadores; no repetidores del pasado, sino productores de nuevos conocimientos; no sólo versados en lo que se ha escrito, sino alertas a encontrar lo que aún no se ha escrito; que no sean capaces únicamente de ajustarse al medio, que lo ajusten a ellos; no sólo productores de escritos de imitación, sino de artículos creativos; no sólo ejecutantes de alta calidad, también compositores y creadores de nuevos patrones.

El pensamiento creativo tiene que trabajarse desde la edad temprana hasta los niveles superiores, tiene que estar presente en todas las estrategias metodológicas que diseñe y ejecute el docente, tiene que estar directamente relacionado con las metas y objetivos de la educación, es importante que se considere como un hábito de la forma en que operamos nuestro pensamiento; sólo de esa manera comprenderemos que es importante que la creatividad ocupe un mejor lugar en nuestra práctica profesional.

En suma son muchos los conceptos vertidos y acuñados por las tendencias modernas en el campo educativo, especialmente de la psicología cognitiva, por ello cabe destacar los planteado por Ralph Y Hallman, citado por I Espinoza
[2], no dice en relación con la creatividad centrada en el profesor/a

El educador creativo

tolera el aprendizaje aoutoiniciado por el alumno/a
Facilita un medio de aprendizaje no autoritario, la libertad posibilita la creatividad
Incita a sus alumnos/as a un sobreaprendizaje, impregnarse con mayor información
Estimula los procesos intelectuales creativos, induce a buscar nuevas relaciones entre datos
Pospone sus opiniones, no bloquea los intentos exploratorios sino alienta a variar los enfoques
Promueve la flexibilidad intelectual, alienta a no seguir un solo método de solución
Fomenta la autoevaluación,
Ayuda al alumno/a a ser más sensible, al ánimo y sentimiento de los demás
Sabe como aprovechar la pregunta en beneficio de la creatividad
Proporciona oportunidades para manipular materiales, ideas, conceptos, herramientas y estructuras
Ayuda a vencer al frustración y el fracaso
Induce a considerar los problemas como un todo.
[1] www.unesco.org/delors/delors_s.pdf
[2] Dcto 31767 CPEIP